jueves, 30 de octubre de 2008

LUPUS ERITEMATOSO SISTÉMICO Y TUBERCULOSIS




Como premisa haré enfasis en dos patologias de suma importancia dado su prevalencia a nivel mundial y las complicaciones que acarrea el padecer ambas entidades, para ello se dará comienzo a un breve concepto para facilitar la comprensión del texto.



El Lupus Eritematoso Sistémico es una enfermedad de etiología desconocida en la que autoanticuerpos e inmunocomplejos patogénicos ocasionan la destrucción de células y tejidos. Aunque esta enfermedad puede ocurrir a todas las edades, es más frecuente entre las mujeres jóvenes. Se estima la prevalencia de esta enfermedad en 20 a 80 casos por cada 100.000 habitantes/año. Los autoanticuerpos producidos ocasionan la formación de inmunocomplejos que, al acumularse en tejidos y órganos conducen a las lesiones sintomáticas. Los órganos más afectados por estos depósitos son los glomérulos, la piel, los pulmones, el líquido sinovial entre otros. La respuesta inmunológica anormal incluye una hiperactividad de los linfocitos T y B y una regulación inadecuada de dicha hiperactividad.



La tuberculosis, una de las enfermedades más antiguas que afectan al ser humano, es causada por bacterias pertenecientes al complejo de Mycobacterium tuberculosis. Esta enfermedad suele asentar en los pulmones, pero en 33% de los casos afecta a otros órganos. El contagio suele ocurrir por vía aérea, a través de las gotitas que expulsan los pacientes con tuberculosis pulmonar contagiosa. Si se trata correctamente, la tuberculosis debida a cepas sensibles a ciertos fármacos se cura prácticamente en todos los casos, pero sin tratamiento más de la mitad de los enfermos pueden morir en un plazo de cinco años.

Tradicionalmente la tuberculosis (TB) y el lupus eritematoso sistémico (LES) se conocen como “las grandes simuladoras”. La relación que guardan entre sí estas dos enfermedades es compleja y en muchas ocasiones comparten manifestaciones. En el presente estudio se revisan los puntos de convergencia de las dos enfermedades, incluyendo factores genéticos, inmunológicos, farmacológicos y clínicos.


TUBERCULOSIS Y LUPUS ERITEMATOSO SISTÉMICO ¿CUAL MIMETIZA A CUAL?
Acta Pediatr Mex2006;27(6)341-8
Articulo de revisión
Dr. Marco A. Yamazaki-Nakashimada, Dra. Edith González-Serrano, Dr. Jose Luis Castañeda-Narváez




La intención principal del artículo es presentar el dilema diagnostico en los pacientes con estas patológias, abordando la relación que guardan estas dos entidades y sus puntos de convergencia, entre las cuales tenemos:
  • Síntomas constitucionales: Pérdida de peso, fiebre, fatiga.
  • Manifestaciones dermatológicas
  • Manifestaciones pulmonares
  • Manifestaciones renales
  • Manifestaciones hematológicas
  • Manifestaciones musculoesqueléticas
  • Manifestaciones cardiacas
  • Manifestaciones gastrohepáticas
  • Manifestaciones neurológicas
  • Manifestaciones trombóticas
  • Autoanticuerpos

Por lo cual se obtiene como conclusión que ambas enfermedades se imitan la una a la otra y constituyen en ocasiones un reto diagnóstico debido a que comparten muchas manifestaciones clínicas, sin embargo, la distinción entre ellas es fundamental para administrar un adecuado tratamiento.

REFERENCIAS

  • HARRISON, medicina interna, edición 16.
  • http://www.imbiomed.com.mx